Terraza imprescindible a conocer en verano, ubicada en un chalet ambientado al estilo de una antigua casa burguesa del Shanghái de los años 30.
En El Bund, aunque la comida es china, no tiene nada que ver con cualquier otro restaurante con este tipo de platos orientales. Se trata de un espacio elegante, con dos comedores interiores (que no destacan especialmente), y con la joya de la corona ubicada en su jardín (la primera terraza de la planta baja).
El espacio permite unas veladas extraordinarias en las que una extensa carta de especialidades del país asiático, un muy buen servicio, así como aparcacoches, redondean la experiencia.
Ya son famosos sus dim sums elaborados artesanalmente a diario (en nuestro caso probamos los rellenos de verduras, los de gambas y los de setas y carne) . Excelentes sus “Fideos frescos” (noodles con gambas, huevo, verduras y carne).
En su extensa carta cuentan también con carnes, pescados y curiosos entrantes como la “Ensalada de medusa”.
En conjunto, sitio ideal para aproximarse a la comida china en un ambiente muy cuidado, y a precios infinitamente más baratos que el Tse Tang Villa Magna (por compararlo con otro chino de prestigio). Nuestra recomendación: conocerlo en verano para disfrutar de su jardín.
