De entre los locales con más solera en Madrid, La Castela destaca por su buen hacer y alta calidad de producto desde 1989.
Ubicada junto al Retiro en un local que antiguamente ocupaba la Bodega de Méntrida, concretamente desde 1929, aún conserva detalles característicos de las tabernas madrileñas, como el mostrador de estaño, los vasares de estuco, los espejos y los mármoles.
Se puede tanto tapear en su animada barra como sentarse en uno de sus comedores de estilo clásico.
Además, en 2016 abrieron un segundo local, “Castelados“, más amplio que el original pero donde se sigue disfrutando de sus elementos clave: buena cocina tradicional, producto de calidad y ambiente de casa de comidas.

Imprescindibles a pedir: las “Milhojas de ventresca” (algo aceitosas pero extremadamente sabrosas), el “Revuelto de merluza y calabacín” (muy delicado, excelente combinación), la “Merluza al aceite de oliva” (muy bueno) o la “Tarta fina de manzana”.
Aparte, y dependiendo de temporada: buen “Boletus con jamón y huevo”, magníficas y generosas “Zamburiñas”, “Chipirones encebollados” y marisco variado.
En suma: una taberna que propone un viaje al pasado, aunque con producto de lo más fresco, a precios competitivos.

- Restaurante: “La Castela“
- Dirección: Calle del Dr. Castelo, 22, 28009 Madrid