Al llegar a NaDo, en la calle Prim, y sin ningún cartel que anuncie el restaurante, te recibe una puerta holandesa que recuerda a las antiguas casas de los pueblos. La sorpresa continúa al entrar por la cocina, que debes atravesar para entrar en el comedor. Todo ello ubicado en un espacio abovedado con ladrillo visto que antiguamente fue una carbonera.

Pero la verdadera emoción llega con su cocina: pura Galicia actualizada y creativa, donde el mar, pero también las zonas de interior, son los protagonistas.

El cocinero Iván Dominguez lleva las riendas tanto de NaDo en Madrid como de su casa original en A Coruña. Una cocina de elaboraciones técnicas y complejas, con resultados aparentemente sencillos pero con mucha personalidad.

Para comer, opción de carta o menú degustación (9 platos, 68€). En esta ocasión, no pudimos decantarnos por el menú ya que solo lo sirven hasta las 14:00 o las 21:00. Sin embargo, pudimos disfrutar de una peculiar pero deliciosa “Ensaladilla de albacora a la manera de mi madre” y un “Centollo desmigado y emulsión de sus corales” épico: puro sabor al marisco y al mar.

De principales: “Salmonete asado, jugo de espinas y apio-nabo” (muy delicado y sabroso) y “Zorza de Porco Celta asada al carbón y repollo de Betanzos” (nos sorprendió menos).

Finalizamos con un buen café de filtro y dos postres excelentes: “Flan de NaDo” y “Helado de queso de Cebreiro, jugo de membrillo y nueces”.

En definitiva, experiencia muy recomendable; deseando volver para seguir probando platos.

• Restaurante: “NaDo“
• Dirección: Calle de Prim, 5, 28004 Madrid
• Precio medio: 65-80€